martes, 20 de mayo de 2014

Tarta de mousse de naranja y chocolate.













¡Ummmm!....

Hola de nuevo, hoy os traigo una tarta de mousse de naranja y chocolate. Toda una delicia, suave y con una textura muy delicada. Cada bocado se deshace en la boca, dejando un suave sabor a chocolate y un sutil aroma a naranja. Es un postre ligero y no excesivamente dulce.


Esta mousse de naranja es muy suave y nada amarga, se complementa perfectamente con el chocolate. Animo a todo aquel que dude un poco, a probarla, seguro que le resulta muy agradable al paladar. Y ahora, que comienza el calor, si la metemos un poco al congelador, tendremos un refrescante postre.


Esta tarta se compone de cuatro capas. La primera capa es un bizcocho genovés de chocolate, calado con almíbar, la segunda capa es una ganache ligera montada de chocolate que no es una mousse propiamente dicha, aunque su textura es muy similar. La tercera capa la forma la mousse de naranja y por último, una fina capa de cobertura de chocolate.

Presentada la tarta, veamos cómo prepararla y por último, cómo hacer el montaje de la misma. Manos a la obra.

TARTA MOUSSE DE NARANJA Y CHOCOLATE

Cantidad: esta tarta es para aproximadamente 14-16 raciones. Diámetro: 26 cm.
Utensilios: un aro de montaje o el aro de un molde desmontable. Una bandeja de horno para la plancha de bizcocho.

Ingredientes:                                       

Para el bizcocho:
  • 5 huevos grandes
  • 30 gr cacao puro sin azúcar
  • 60 gr agua hirviendo
  • 100 gr azúcar
  • 75 gr harina de repostería
  • 1 cucharada de postre de esencia de vainilla
Para el almíbar:
  • 250 gr agua
  • 250 gr azúcar
  • 25 gr de licor (anís usé yo)
  • Opcional: una cucharada de agua de azahar
Para la ganache ligera montada:
  • 150 gr chocolate con leche
  • 150 gr chocolate amargo (53% cacao)
  • 500 ml nata para montar (muy fría)
Para la mousse de naranja:
  • 100 gr zumo de naranja natural
  • 200 ml nata
  • 4 claras de huevo
  • 175 gr azúcar blanca
  • 4 hojas de gelatina
  • ralladura de 1 naranja
Para la cobertura de chocolate:
  • 80 gr nata
  • 120 gr azúcar
  • 100 gr agua
  • 40 gr cacao puro en polvo
  • 3 hojas de gelatina

Preparación:                                       

Primero prepararemos la plancha de bizcocho:

1. Cogemos la bandeja del horno y la cubrimos con papel vegetal. Si queremos, la engrasamos y espolvoreamos un poco de harina. Reservamos.
2. En un bol mediano, colocamos el cacao en polvo y añadimos el agua hirviendo. Removemos bien, incorporamos la esencia de vainilla y dejamos templar.
3. Pesamos y tamizamos la harina, junto con la sal. Reservamos.
4. Precalentamos el horno a 170ºC, calor arriba y abajo.
5. Cogemos un bol grande y mezclamos los huevos y el azúcar.
6. A continuación, colocamos un cazo con agua en el fuego y encima ponemos el bol con la mezcla de huevos y azúcar. Es importante que el agua no toque el fondo del bol, no debiéndose sobrepasar los 37º, para evitar que los huevos se nos puedan cuajar; por eso es importante que sólo el vapor toque el bol.
7. Comenzamos a batir los huevos a velocidad rápida, por lo menos, 5 minutos. Sin parar, para que la mezcla aumente su volumen.
8. Pasados estos minutos, retiramos el bol del cazo. Y ahora, sin calor, seguimos batiendo otros 6 minutos o hasta que suban al triple de su volumen. Este proceso, es muy importante, para que los huevos adquieran una consistencia adecuada y que al añadirles la harina, no se hunda la mezcla.
9. Retiramos 1/2 litro escaso de la mezcla de huevos y los añadimos a la mezcla de cacao.
10. Ahora, tamizamos la harina sobre la mezcla de huevos restante, haciendo movimientos envolventes con una espátula o unas varillas, sin mover en exceso.
11. A la mezcla anterior, ahora incorporamos el cacao y movemos despacio hasta que quede casi homogénea.
12. A continuación, volcamos la masa sobre la bandeja del horno que tenemos preparada y con ayuda de una espátula, la extendemos, cubriendo toda la superficie y procurando que quede lo más uniforme posible.
13.Colocamos la bandeja en el horno, a media altura, calor arriba y abajo y horneamos entre 15-20 minutos. Aunque como sabéis, siempre dependerá de cada horno. En cuanto veamos que la superficie del bizcocho está cocida, lo pinchamos con un palillo y si sale limpio, ya está listo. Lo dejamos enfriar.


Para elaborar el almíbar, seguiremos los siguientes pasos:
  1. Ponemos todos los ingredientes en un cazo, el agua, el azúcar y el licor. Sin parar de remover, lo llevamos a ebullición, dándole un fuerte hervor.
  2. Seguidamente, lo retiramos del fuego, lo tapamos con una tapadera y lo dejamos enfriar por completo para poder utilizarlo. Por lo que es necesario hacerlo el día antes.
  3. Opcional: cuando haya enfriado el almíbar podemos añadirle una cuchara de agua de azahar.
La ganache ligera montada:
  1. Troceamos el chocolate, bien con la mano o con un cuchillo de sierra. No es necesario que sean trozos muy pequeños. Lo ponemos en un bol mediano.
  2. Colocamos la nata en un cazo y lo ponemos en el fuego.
  3. En cuanto veamos que la nata va a romper a hervir, retiramos el cazo del fuego.
  4. Añadimos la nata, en tres veces, a los trozos de chocolate y movemos hasta que el chocolate quede totalmente derretido e integrado. Dejamos enfriar. Si queremos podemos añadir una cucharadita de esencia de vainilla.
  5. Una vez enfriada y en el caso en el que hiciera un poco de calor, la podemos meter 15 minutos al frigorífico antes de empezar a batir a velocidad media. Iremos viendo como va tomando un color más claro y poco a poco se va espesando. Seguimos batiendo hasta que al sacar la varilla, la ganache quede pegada a ella, con una textura parecida a la mousse de chocolate y reservamos en el frigorífico.

Notas:

Es importante la temperatura que tenga la mezcla antes de batirla, ya que si está muy fría, endurecerá y costará mucho montarla. Si por el contrario está caliente no espesará y se cortará.
Es necesario que está a temperatura ambiente o un poco enfriada en el frigorífico, pero que no endurezca.
Un truco: si se nos cortara la crema y vemos que queda grumosa y no monta, la metemos unos segundos al microondas y removemos con unas varillas. Cuando la tengamos de nuevo con una textura lisa, la dejamos enfriar y volvemos a montar.


Ahora veamos cómo preparar la mousse de naranja:
  1. Lo primero es colocar la gelatina en un cuenco con agua fría, hasta que se ablande, unos 5 o 6 minutos. 
  2. Ahora cogemos un cazo y ponemos a calentar la nata con la mitad del azúcar, a fuego medio. Mientras calienta la nata, rallamos la naranja y preparamos el zumo. Antes de que empiece a hervir la nata, la apartamos del fuego e incorporamos la gelatina, moviendo bien, hasta que quede bien integrada.
  3. Seguidamente añadimos, a la nata, el zumo de naranja y la ralladura. Pasamos toda la mezcla a un cuenco para que vaya enfriando.
  4. Ahora, vamos a batir las claras a punto de nieve. Un poco antes de que queden montadas, añadimos el resto del azúcar que teníamos reservada, en forma de lluvia, poco a poco.
  5. A continuación, incorporamos las claras a la mezcla de nata, con ayuda de una espátula, haciendo movimientos envolventes y con cuidado; para que las claras no bajen mucho.
  6. Utilizar lo antes posible.
Notas:

Lo ideal es utilizar la mousse nada más terminar de hacerla. Para ello, podemos tener la tarta a medio montar, con la capa de bizcocho y la ganache, a falta de incorporar la mousse de naranja.



Cobertura de chocolate:
  1. Ponemos la gelatina en remojo, en agua fría.
  2. Colocamos en un cazo la nata, el azúcar, el agua y el cacao en polvo.
  3. Hervimos un minuto aproximadamente, removiendo con unas varillas.
  4. Quitamos del fuego el cazo y añadimos la gelatina, bien escurrida. Mezclamos bien.
  5. Reservaremos en la nevera toda la noche.
  6. Al día siguiente, lo calentamos al baño María o en el microondas. No debemos sobrepasar los 40ºC.
  7. Lo utilizamos inmediatamente, sacaremos la tarta del frigo y la cubrimos con la cobertura de chocolate. Y de nuevo al frigorífico.

Montaje de la tarta                                      

1º. Cogemos la fuente, plato o bandeja donde vayamos a servir la tarta y empezaremos a montar la tarta.

2º. Cortaremos la plancha de bizcocho a la medida del aro de montaje. Debe quedar ajustado.

3º. A continuación, bañaremos, a nuestro gusto, el bizcocho con el almíbar. Cuanto más mojado, más jugoso estará.

4. La siguiente capa que colocaremos será la ganache de chocolate, que estará ya montada y reposando en el frigorífico. La extendemos e intentamos que la parte superior quede lo más lisa y uniforme posible. (Os aconsejo tener hasta este paso terminado, antes de hacer la mousse).

5. Seguidamente, incorporamos la mousse de naranja. Alisando, de nuevo, la parte superior de la capa.

6. Ahora dejaremos reposar la tarta, como mínimo, 4 horas en el frigorífico. Aunque lo mejor es dejarla toda la noche en el frigorífico.

7. Al día siguiente, calentamos la cobertura de chocolate. Sacamos la tarta y la cubrimos con el chocolate caliente.

8. Volvemos a meterla de nuevo al frigorífico para que la cobertura endurezca, unas 2 horas como mínimo.



Una vez haya pasado el tiempo necesario para que la cobertura haya cuajado, procederemos a desmoldar la tarta. Es un operación sencilla y para que todo salga bien, seguiremos los siguientes pasos:
  • Cogeremos dos trapos de cocina. Los humedecemos bien y los introducimos en el microondas para calentarlos, un minuto o minuto y medio.
  • ¡Cuidado al sacarlos que queman!.
  • Los colocamos alrededor del aro, que lo toquen. Esto favorece que la zona de la tarta en contacto con el aro se reblandezca, debido al calor que desprenden los paños de cocina y favorecerá su posterior desmoldado.
  • Dejaremos los paños, alrededor del aro, un par de minutos aproximadamente.
  • Seguidamente con mucho cuidado, con la punta de un cuchillo, vamos a repasar el contorno de la tarta, sólo la capa superior, la de la cobertura de chocolate para que quede separada del aro.
  • Ahora, muy despacio, iremos retirando el aro de montaje; bien abriéndolo o desplazándolo hacia arriba.
  • Si quedan algunas irregularidades en el contorno de la tarta, cosa muy frecuente, con una espátula pequeña, iremos alisándolas.
  • Y, por fín, ya hemos terminado de montar y desmoldar nuestra tarta. Lo último que nos queda es la decoración final. Decoradla a vuestro gusto y ¡a comer!.

Para finalizar os voy a dar algunas sugerencias para elaborar la tarta más cómodamente:

Dos días antes, preparad el almíbar y lo dejáis en el frigorífico; así una cosa lista para usar.

Al día siguiente, elaboramos y montamos la tarta, a falta de incorporar el chocolate de cobertura, aunque lo dejaremos hecho y reservado en la nevera. La cobertura de chocolate la incorporaremos bien por la noche, en el caso de que la tarta la hayamos montado por la mañana o bien a la mañana siguiente si la hemos montado por la noche.

El último día, desmoldaremos la tarta, cuando el chocolate de cobertura haya cuajado y decoraremos a nuestro gusto.

¡Buen provecho! y a disfrutarla.

Espero que os haya gustado, me despido de vosotros y hasta pronto.

2 comentarios :

  1. Perfecta, me la llevo. parece de pastelería.

    Si la hago ya te diré como me ha quedado.

    hasta pronto.

    *Pilar*

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    1. Hola Pilar, a ver si te animas y me cuentas cómo te ha salido. ¡Seguro que estupenda!. Un abrazo.

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