miércoles, 11 de diciembre de 2013

Tarta Selva Negra. (2º parte)

Muy buenas a todos, tal y como prometí, os traigo la segunda parte de la tarta Selva Negra. Si no habéis leído la primera parte, aquí os dejo el enlace: tarta Selva Negra (1º parte).

En esta nueva entrada vamos a centrarnos en completar el montaje de la tarta y en cómo decorarla.

El equipamiento que vamos a necesitar es:

  • Un aro de montaje o el aro de un molde demontable.
  • Una manga pastelera.
  • Una boquilla de estrella grande.

Para la decoración necesitaremos los siguientes ingredientes:
  • 1/3 de la nata montada que hemos preparado
  • Fideos de chocolate, para los laterales de la tarta
  • Copos o virutas de chocolate, para la parte superior
  • Y guindas en almíbar.

Primero, vamos a recordar lo que ya tenemos preparado: por un lado la receta del bizcocho de chocolate, por otro la del ganache de chocolate con leche montado y la nata batida, preparada.

Primero cogeremos el aro que vamos a emplear para montar la tarta y comprobamos que el diámetro del bizcocho encaja perfecto dentro del aro. Si el bizcocho fuera un poco mayor que dicho aro, colocamos el aro sobre el bizcocho, lo centramos y recortamos, por el interior del aro, el bizcocho y así quedará al tamaño justo.

Lo siguiente será cortar nuestro bizcocho, cogemos un cuchillo grande de sierra y cortamos el bizcocho por la mitad, obteniendo dos capas de aproximadamente 1,5 cm. Las separamos con ayuda de una bandeja de cartón o un plato de cartón, metiéndolo entre las dos capas; así será más fácil manipularlas sin peligro de que se rompan al moverlas. Esto parece un poco liado pero es bastante sencillo, sólo hay que tener cuidado y procurar que las dos capas tengan, aproximadamente, el mismo grosor.

Bien, pues ahora comencemos con el montaje:

  1. Primero, tomamos la fuente, el plato o pie de tarta donde vayamos a presentar la tarta y centramos el aro de montaje.
  2. Colocamos en la base la capa inferior del bizcocho y lo calamos, con ayuda de un pincel, con el almíbar. La cantidad de almíbar dependerá del gusto de cada uno.
  3. La siguiente capa a colocar es el ganache montado, con ayuda de un espátula en ángulo, echamos el ganache, lo extendemos y vamos a intentar dejar la superficie lo más lisa posible, nivelada. El espesor de esta capa será mayor que la del bizcocho.
  4. A continuación, colocamos encima del ganache la otra plancha de bizcocho y volvemos a calar en almíbar.
  5. Por último, antes de echar la capa de nata montada, separaremos aproximadamente 1/3 de ésta y la reservamos en el frigorífico para la decoración.
  6. Ahora sí, echamos la nata sobre la capa de bizcocho, rellenamos hasta la parte superior del aro e iremos alisando con pasadas muy suaves, para que quede lo más uniforme posible. Ya tenemos la tarta montada.
  7. Antes de decorarla, la dejaremos enfriando un mínimo de 4 horas en el frigorífico.

Pasadas esas horas de reposo, sacamos de nuevo la tarta y vamos a retirar el aro que hemos utilizado para su montaje. Os voy a dar dos opciones, podéis optar por la que queráis, incluso las dos pueden aplicarse juntas.

  • 1º opción: cogemos un paño limpio de cocina, lo humedecemos un poco y lo introducimos unos segundos en el microondas, debe quedar caliente. Lo sacamos, con cuidado de no quemarnos y lo colocamos alrededor del aro de montaje. Lo mantenemos un par de segundos y despacio levantamos el aro.
  • 2º opción: tomamos un cuchillo de hoja fina y larga, lo vamos mojando con agua caliente, lo secamos y repasamos, con mucho cuidado, el perímetro de la tarta; para que vaya separándose del aro. Hay que ir mojándolo de vez en cuando. Terminado esto, levantamos muy despacio el aro.

Cualquiera de las dos opciones puede usarse sin problema. Ésta, quizás, sea la parte más complicada. Hay que hacerlo despacio y con maña.

Por último nos queda decorar la tarta. Con la nata que hemos reservado y con ayuda de una espátula pequeña, vamos cubriendo los laterales de la tarta con una fina capa de nata. Antes, si queremos, recortamos unos trozos de papel de hornear y cubrimos el plato; de este modo cuando apliquemos la nata no mancharemos el plato y cuando terminemos la decoración de los lados, retiramos los papeles y listo. Que no nos apetece, pues habrá que retirar los restos de nata que queden en el plato, antes de echar los fideos de chocolate.

Después, vamos cogiendo pequeñas cantidades de fideos de chocolate y con ayuda de la misma espátula, vamos pegándolos en los laterales. Los fideos que vayan cayendo al plato los recogemos con la espátula y los volvemos a pegar. Es bastante entretenido pero que luego muy chulo.


Cuando hayamos pegado los fideos de chocolate, cogemos la manga pastelera, colocamos la boquilla y la rellenamos con el resto de nata. Hacemos antes una pruebas en un plato para ver como de grandes queremos los rosetones y cuando lo tengamos claro, empezamos en la tarta. Hacemos los rosetones que queramos, más juntos o más separados. Un pequeño consejo; para hacer los rosetones de nata, la manga pastelera debe estar perpendicular a la tarta todo el rato durante el movimiento. El giro ha de ser circular, desde las 3 hasta las 12 (imaginando una esfera de un reloj) y por último, levantamos.

Faltan las guindas que las colocamos sobre los rosetones de nata. Antes las debemos escurrir y secar. Por último, entre los rosetones, espolvoreamos las virutas o copos de chocolate.

Y ¡¡¡¡¡¡tachaaaaaannnnnn!!!!!!! ya lo tenemos, nuestra tarta Selva Negra lista para DISFRUTARLA.

Sólo deciros una cosa, parece más complicado de lo que es, una vez te pones va saliendo todo. Hay que organizarse los tiempos y tener ganas de hacerlo. Aunque, al final, lo que cuenta es lo que aprendes y el cariño con que lo haces. Si no sale perfecto a la primera, pues a la segunda seguro que sale mejor.

Por cierto, esta tarta debe servirse muy fría. ¡Bon appétit!.

¡Mucho ánimo! que esto es cuestión de empezar, de equivocarse, de aprender y sobretodo de disfrutar. UN BESO.

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